Playa de Es Cavallet en Ibiza, se encuentra ubicada en un privilegiado entorno como es el de un parque natural; bien conocida por la práctica del nudismo, muy popular entre el público gay.

La cala de Es Cavallet, fue vanguardista del nudismo en España y la primera playa nudista oficial de Ibiza, si bien para visitarla y gozar de ella no es obligatorio ir desnudo.

La playa de Es Cavallet en Ibiza, debe su nombre, que significa “el caballito”, a los tiempos en que este animal hacía virar la noria de agua que hay justo a la entrada a la playa y que servía para ocupar los estanques de agua que generan la conocida Sal de Ibiza.

Más información sobre la playa natural Es Cavallet en Ibiza

La cala natural de Es Cavallet se trata de un extenso médano, en el que prevalecen las dunas apoyadas por un tupido cinturón de bosque. Se trata de una zona protegida, puesto que está en el parque de las Ses Salinas, ha hecho de ella una zona virgen con ausencia de edificaciones sin contar sus 3 espléndidos restaurants, que se integran plenamente en el paisaje como El Chiringay, el restorán beach club más festero y de entorno gay, tal y como su nombre señala, El Puesto que si bien se llama de esta forma es un sitio muy cuidado y para finalizar, La Escollera, idóneo para gozar de las vistas y del mar mientras que saboreas una rica comida. Inmediatamente antes de llegar hallarás asimismo el conocido Coricancha, un increíble restaurant en el que la gastronomía Nikkei es la protagonista.

La playa de Es Cavallet

Es una de las playas más famosas de Ibiza debido a que sus aguas son trasparentes y la pluralidad de turquesas y azules del fondo es increíble, si bien los vientos son usuales y las olas algo más fuertes en esta playa que en otras, por estar abierta al mar, lo que hace que se amontonen bancos de posidonia en la ribera que estropean los colores aunque esto ayuda a que sea una playa apacible hasta en pleno agosto.

En cuanto al turismo, el tipo de gente que acude a esta playa es variado y pariopionto, en ella se mezclan gente de la jet-set, gente de la noche, nudistas integrales, gays, parejas múltiples, por lo general, gente de todo tipo y condición. Podríamos dividir la playa en 3 parte diferentes: la primera zona, cerca del aparcamiento, es la de entorno variado y familiar, donde los jóvenes practican en la cancha de voley playa. La zona media es la verdaderamente nudista. Y el final de la playa es de entorno gay, siendo esta zona un referente para el turismo LGBT.

Cómo llegar a la cala de Es Cavallet

La carretera que lleva hasta la playa de Es Cavallet es bastante angosta en ciertos tramos, en los que vamos a deber ceder o bien dejar que nos cedan el paso, mas al tiempo vamos a poder ir contemplando el paisaje de las salinas, una llanura separada por grandes rectángulos donde el agua del mar se seca, dejando paso a una espuma que poquito a poco se transformará en sal.

Al final de la carretera, tras un giro a la izquierda, vamos a ver un viejo molino de agua, desde el como empieza la zona de parking gratis, si bien asimismo vamos a poder acceder a un pequeño aparcamiento observado. Ya antes de entrar a la zona de playa, vamos a poder contemplar la salinera en su esplendor si reculamos unos pasos. Merced a la poca profundidad de la zona, y la rica flora, las aves palmípedas hallan un buen sitio para alimentarse. No va a ser extraño contemplar algún flamenco o bien garza picoteando el fondo de alguna salinera.

 

La naturaleza en Es Cavallet

Al bajarnos del turismo la primera cosa que nos llama la atención es una pequeña tienda cubierta por cañas, curiosamente integrada en el paisaje, donde vamos a poder adquirir algún recuerdo o bien algo de de crema para el cuerpo. La enorme salinidad de estas aguas hace singularmente esencial la protección de la piel. Tras caminar unos metros por la arena, descubrimos unos puestos de forma perfecta decorados que invitan a tomar algo fresco. Ciertas casas bajas y viejas a pocos metros de la costa y unas casetas marineras componen los restos de la civilización.

Al mirar a la playa de Es Cavallet Ibiza, con más de un kilómetro de extensión, encontraremos una arena finísima y algunos veleros en el horizonte que se adentran en un mar de aguas celestes, con poca profundidad en los primeros metros. De fondo, un conjunto de islotes dando paso a la isla más cercana a Ibiza, Formentera. El viento acostumbra a soplar flojo en un entorno relajado y de forma profunda respetuoso.